La mano que lleva una Turquesa no conoce nunca La pobreza. Disuelve la actitud de mártir o el auto sabotaje Aporta calma interna, estimula el amor romántico Conocida como la piedra de la alegría y el bienestar. Buena para los viajeros, es una piedra protectora.
La Turquesa es una piedra de purificación. Disipa las energías negativas y limpia la bruma electromagnética. Según el pensamiento tradicional la turquesa une la tierra y el cielo, unificando las energías masculinas y femeninas. Esta piedra es empática y equilibradora. Promueve la autorrealización, ayuda a resolver problemas creativamente y calma los nervios cuando se tiene que hablar en público.
Diámetro del Dije: 1.5 cm